domingo, 6 de julio de 2025

 NI GESTORES TAMPOCO

 





Una parte muy importante de los gestores públicos socialistas forman (aún presuntamente) una extensa banda de delincuentes. Obedecen al denominador común de usar el Estado (lo público), como su propiedad privada. Es decir, usurpan a los españoles su patrimonio común, apropiándoselo. Desde el pago de sus viajes privados hasta sus gustos prostibulares. Toda su forma de actuar responde a semejante aberración. Han formado una extensa y tupida red para extorsionar y expoliar a empresas y particulares privados y públicos valiéndose de las coercitivas herramientas del Estado.

Ahí andan batallando nuestros jueces, nuestra Guardia Civil y algunos comunicadores por desenredar la maraña de prevaricaciones, cohechos, malversaciones de fondos públicos, creación de pruebas equívocas y evasivas, sobornos y demás lindezas en que con tanto ahínco y eficacia se han venido empleando gran parte de nuestros principales gobernantes.

Mas, pudiera haber sido que, con independencia de sus delictivas andanzas, resultasen ser gentes capaces y eficaces en su obligación moral y legal de fomentar mejoras para la comunidad (“contribuyo a agrandar y mejorar la tarta común, aunque yo escamotee un trozo”). Pues no, ni capaces ni eficaces ni laboriosos para el común. Veamos también nuestras contribuciones en millones de euros (datos del último Presupuesto General del Estado de 2023):

1-Agricultura, pesca y alimentación: muy graves empeoramientos sectoriales. 8.970,13

2-Asuntos exteriores, UE y cooperación: el mayor desprestigio internacional y nuevos enfrentamientos estériles o dañinos. 2.192,87

3-Ciencia, innovación y universidades: emigración masiva de nuestros mejores investigadores y descrédito de la más emblemática universidad por sus trapicheos con la presidencia del gobierno. 3.991

4-Cultura: menosprecio y agresion a nuestra cultura histórica y ataque al idioma español. 1.804

5-Defensa: empeoramiento de la atención a los profesionales y a la renovación tecnológica. 18.953

6-Derechos sociales, consumo y agenda 2030: caos asombroso y actividad como agencia de colocación con nepotismo disparatado. 784

7-Economía, comercio y empresa: todos los parámetros relativos a nuestro entorno empeoran ocultos por la inflación, los fondos europeos, el endeudamiento público y los resultados de las grandes empresas. 6.178

8-Educación, FP y deportes: mantiene su pésima gestión (robo de tiempo de docencia a los maestros para dedicarlo a burocracia), ignorancia de la FP y deportes relegados a la actividad privada. 68.200

9-Hacienda: voracidad extrema en la presión fiscal, nepotismo en el control y fracaso en la distribución (salvo “amigos”). 3.326

10-Igualdad: reincidente en los errores, empeoramiento en los derechos de la mujer y circo pseudofeminista. Agencia de colocación de “amigues”. 573

11-Inclusión, SS y migraciones: fracaso rotundo y retroceso clamoroso y compra de la voluntad pensionista. 225.768

12-Industria y turismo: creación de mayores trabas para el mejor desarrollo (inexistente). 10.031

13-Justicia: rema a la contra. Fuente de conflictos y de injusticia. 2.304

14-Juventud e infancia: máquina de puro adoctrinamiento. Nuestros jóvenes sumidos en un oscuro túnel de condena a la dependencia (y, por ello, condenados a la falta de libertad). 135

15-Presidencia, justicia y relaciones con las Cortes: fábrica de conflictos y actividades delictivas. 384,59

16-Política territorial y memoria democrática: aparato de pura propaganda, falseamiento histórico y atención territorial sólo en función de los apoyos políticos. 589,6 + subvenciones (?).

17-Sanidad: inexistente más que para poner trabas partidistas a la sanidad regional cada vez más descohesionada. 3.010

18-Trabajo y economía social: lo social no existe y el trabajo para jóvenes tampoco. 1.158

19-Transportes, movilidad y agenda urbana: desastre total en transportes con retrocesos cósmicos (trenes, carreteras, aviones). No se que pueda significar agenda urbana. Un abultado volumen donde “colocar” amigos, desarrollar vicios y … 21.273

20-Vivienda: fomenta uno de los más graves problemas sociales y torpedea las mejoras. 4.175

21-Interior: desprestigia a las fuerzas del orden y propicia una enorme inseguridad ciudadana. 10.501

22-Transformación digital y función pública: no hay transformación digital y la función pública se ha infectado gravemente por la actividad delictiva de muchos dirigentes. No he logrado localizar el dato, “camuflado” en un genérico de subvenciones.

23-Presidencia del gobierno: puro subalterno para desfigurar y ocultar las calamidades del presidente. 482





Resúmen: en 2024 se prorrogaron los PGE y ascendieron a 694.300 millones ya que se incluyeron los fondos europeos por 199.171 millones (485.986 millones en 2023). Y el gasto del Estado en 2024 fue de 722.846 millones, un 50,6% más que en 2017 (en 7 años el gasto per capita ha pasado de 10.286€ a 14.729€, un 43,2% de incremento). El presidente ha hecho crecer el gobierno todo lo que le ha sido preciso para conseguir y mantenerse en su puesto a cambio de prebendas y bicocas. Su criterio de selección ha huído absolutamente de cualquier consideración profesional, centrado en exclusiva en la adulación, servilismo, mercadeo y sometimiento. Se podría incluso plantear la simpleza de que cualquier mejora pasa por hacer exactamente lo contrario de lo que se lleva haciendo los últimos años. Incluso la simple desaparición de la mayor parte de los ministerios ya aportaría una mejora apreciable.

El mal, como es corriente, comienza por la cabeza. Para que España progrese es imprescindible cambiar a la cabeza y a toda su inmensa guardia pretoriana y cohorte de “agradecidos” (muchas docenas de miles) y conseguir la neutralidad de sus “partidos de apoyo” aunque saben que este es el presidente que mejor les conviene para sus particulares intereses.

Sánchez dinamitó al partido que le permitió encumbrarse del que sólo mantuvo las siglas, creando otro distinto, ajustado a sus personales intereses. En realidad el PSOE no existe, pero se mantiene su fachada para satisfacción de parásitos, de gentes anestesiadas y creídas de que sigue representando sus viejos sentimientos y de temerosos de que no existe una alternativa, sino un enemigo cruel y despiadado al que hay que combatir sin piedad.

Muy contadas voces de la alternativa demuestran capacidad de transmitir con claridad y llaneza la tragedia que sufrimos y cuáles son sus propuestas y recetas para evitar el desastre total.

 

CM

6-7-2025

 


miércoles, 2 de julio de 2025

 MALA GENTE

 





Las fronteras entre la bondad y la necedad son de humo con frecuencia. También ocurre que a ambas se superpone el temperamento, educación y creencias de cada quien.

En mi caso he actuado en la vida conforme a lo que mi conciencia me indicaba. Porque, si alguna vez me planteé contrariarla, fue tal la desazón y malestar que rápidamente rectifiqué: no me siento capaz de vivir contra mi conciencia. En sí mismo no significa que yo haya actuado siempre de manera bondadosa pero sí que llevo en mis genes y en mi educación intentarlo y creo haberlo alcanzado con bastante rotundidad.

Se trata, a mi ver, de que el yo profundo permita actuar conforme a la conciencia. Y que, previamente, la carga genética, la labor de los padres y abuelos y la de cuantos formadores intervienen hayan permitido ahormar la conciencia conforme a los patrones de la bondad. En este aspecto yo tuve una impagable suerte: de mis padres y abuelos recibí una herencia genética y unas enseñanzas que remacharon después mis maestros, enfocadas siempre hacia el buen sentir y bien proceder.

No es casual por tanto que todos mis hermanos hayan sido magníficas personas, que mi círculo más próximo de amigos también lo hayan sido y que, en general, haya tenido con cuantos he podido relacionarme unas pautas de conducta inspiradas por el buen proceder. Y, ante todo, que tenga una esposa de una bondad infinita, de malicia cero, y unos hijos y nietos que brillan por su bondad y afabilidad.

Siendo así, resulta muy difícil, con frecuencia imposible, comprender a quienes se rigen por la maldad. Según le vaya en la feria a cada quien, se opinará que la mayor parte de la gente es buena o que es mala. Filósofos para defender lo uno y lo contrario los tenemos de gran calidad de pensamiento. Pero aquí me referiré estrictamente a mi modesta experiencia.

En general, yo me he encontrado con buena gente, con muy buena gente que también me empujaron a que yo lo fuera, o lo intentara. Quizás por ello más me choca y resulta llamativo que haya mala gente, es decir, que sean profundamente malos, que sean perversos, que deseen y gocen con el sufrimiento ajeno, que interpreten sistemáticamente la mala intención del otro, diga lo que diga o haga lo que haga. Son los que jamás pueden encontrar responsabilidad en sus propios actos cuando yerran. Porque la culpa siempre corresponde a otro, puesto que “el otro” siempre pretende dañar. Un perfecto efecto espejo.

Es perfectamente lógico que la mala gente se encuentre sola, aislada y asediada por un universo malvado, tan solo deseoso de causarle daño.

 

Nos conocimos cuando rondábamos los veinte años, con escasos meses de diferencia. Eran las dos hermanas menores de la que es la mujer de mi vida, con la que me casé y con la que tuve la dicha enorme de tener dos hijos. Cuando conocí a su padre no tuve la menor duda de que se trataba de una buena y gran persona. Su madre no creo en absoluto que fuera mala persona, pero posiblemente la crueldad y barbaridades de la guerra la habían marcado a fuego en un entorno familiar profundamente herido por el dolor y la amargura. Como ambas hermanas recibieron tanto en casa como en el colegio una educación similar a la de su hermana mayor, tampoco la educación recibida debe justificar la bondad en una y la maldad en las otras dos. Una vez más enfrentamos la incógnita de cual pudiera ser la razón, fuera de la herencia paterna y de la educación recibida, que pueda justificar la perversidad de esas dos personas. Porque ya lo eran cuando nos conocimos y, por tanto, su desarrollo posterior no fue el causante de su ruindad, sino, en todo caso, un perfeccionamiento de la misma.

Naturalmente no era posible que yo mantuviera trato con semejantes malignas. Aún así, aprovechando la gran estima que recibí de mi suegro, cuanto en mi mano estuvo hice para favorecerlas en cuanto dependía de la autoridad de aquel.  A modo de pequeños ejemplos, recuerdo aquí que conseguí que la mayor de ellas viajase a Italia por puro placer (a los cuatro días llamaba pidiendo sugerencias porque ya había visto allí todo lo que había que ver) o que la más pequeña pudiese apuntarse a un curso de inglés en Edimburgo. Más trascendencia tuvo que la gestión de mi mujer con buenos amigos nuestros le permitiese aprobar a la mayor sus estudios de agrónomos o que la pequeña entrase a trabajar en el ministerio de comercio (desde el que luego consiguió destinos en embajadas en el extranjero). Ésta sí trabajó (al menos en apariencia), por lo que quedó en aprendiz de parásito, experta en bajas psiquiátricas; la mayor de las dos fue una gran maestra en parasitismo toda su vida (salvo un día que viajó a Almería para un trabajo y se dio la vuelta ese mismo día). Madrina de bautismo de mi hijo y de mi nieta, tampoco en ello cumplió, ni les dio apoyo espiritual (le daba “asco” cómo comía su entrañable ahijada), ni aún menos fue modelo a seguir en sus vidas. La única Navidad que tuvo que pasar sola en su vida mi hija fue porque esa tía, apenas una hora antes de comer, le dijo que no quería comer con nadie, habiéndola invitado días antes.

La delicada salud de mi mujer hace años que le viene impidiendo trasladarse con facilidad. Aún así, nos desplazamos con gran dificultad cuando una y otra hermana estuvieron hospitalizadas. Jamás mi mujer recibió ni una sola visita de ninguna de ellas, ni en el hospital ni en casa (a menos de ocho kilómetros del hospital al que acudía dos veces al año la más pequeña).  

Mi mujer tuvo que convencer con enorme dificultad al director del hospital donde agonizaba su madre para que no la expulsase, debido a que la más pequeña gritaba por los pasillos que querían asesinar a la madre por facilitarle medicamentos que aliviasen su insoportable dolor. Esa misma hermana pequeña aplicó con frialdad a su hermana idéntico rigor cuando, alojada en su casa, se retorcía de dolor al final de su vida.

Los meses anteriores a sus muertes ninguna de las dos hermanas dejaron pasar día sin telefonear a mi mujer, brutalmente enfrentadas entre sí, pidiendo su mediación para obtener apoyo a la una o a la otra. Padeció al teléfono inmensamente mi mujer (y yo padecí en silencio) los ataques más feroces entre ambas pécoras. Un dia, los gritos y golpes de la más pequeña, los insultos más graves a la enferma (a quien hacía culpable de toda su vida desgraciada) y las blasfemias más hirientes contra todo lo sagrado (a quienes adjudicaba también la causa de su desgracia), me obligó a gritar ¡se acabó!; calló y cortó la comunicación. Pocos días después se atrevía a bromear, “no vaya a ser que tu maridito me vuelva a hacer callar”.

Siempre dije que no habían querido a nadie. Alguien me corrigió porque defendía que querían a sus perros-mascotas con toda su alma. ¡Mentira! Ambas tuvieron un proceso muy lento y previsible hacia la muerte. ¡Ninguna se ocupó del futuro de sus perros!



FUE LA CASA FAMILIAR CASTAÑO-ORTEGA


Finalmente dejar aquí constancia de cuales fueron sus últimas voluntades en ¡testamentos del 4 de octubre 2022!: cada una a favor de la otra y, en su defecto, ¡Cáritas Diocesana!

Alguien de Cáritas entrará en algún momento en lo que fue casa familiar, en el pueblo. Y allí, alguien tendrá que destruir viejos documentos y fotos, cartas, depósito de recuerdos y dijes de familia que ambas (¡la que presumía de atea y la adepta a brujerías!), decidieron que destruyera un desconocido de la organización diocesana.

 

Pido perdón a mi mujer y a mis hijos por el dolor que este somero apunte de mis cuñadas les produzca. En lo que me ha sido posible he reprimido mi profunda repugnancia hacia esta mala gente. Pero he creído de justicia y verdad poner de manifiesto el injusto dolor y profunda amargura que han causado estas dos perversas a la hermana mayor que sólo el bien les procuró.

Fallecieron en corto espacio de tiempo en dos hospitales distintos. Desde cada uno, en su momento, recibí llamadas en mi teléfono anunciándome el correspondiente fallecimiento. ¿Quién facilitó mi teléfono a esos dos hospitales?

Naturalmente acudí de inmediato en uno y otro caso para hacerme cargo (en nombre de mi mujer) de la organización y gastos de los entierros. Con la ayuda inestimable de la prima Milagros de la Torre, ambos se efectuaron conforme al respeto y buen nombre que a mi mujer y a la familia de sus abuelos Pedro Ortega y Amparo Calero corresponde. Una vez más mandó la conciencia (¿o la necedad?).

Ahora peleo con el banco el abono de los gastos. Pero eso ya es otra historia.

 

CM

2-7-2025

 


sábado, 28 de junio de 2025

 ’AMNĒSTÍA (Olvido)

 



LETE, DIOSA DEL OLVIDO


Amnistía: “Olvido legal de delitos, que extingue la responsabilidad de sus autores” (RAE).

La facultad corresponde al Congreso de los Diputados mediante una Ley Orgánica.

La Ley Orgánica 1/2024 de 19 de junio se aprobó por el Congreso “para la normalización institucional, política y social en Cataluña”, por 177 votos a favor (PSOE, Sumar, ERC, JPC, Bildu, PNV, Podemos y BNG) y 172 en contra (PP, Vox, UPN y CC).

Tal ley, “amnistía todos los hechos que hayan sido declarados o estuvieran tipificados como delitos o como conductas determinantes de responsabilidad administrativa o contable, vinculados a la consulta celebrada en Cataluña el 9 de Noviembre de 2014 y al referéndum del 1 de Octubre de 2017 (declarados ambos inconstitucionales en las sentencias del Tribunal Constitucional 31/2015, de 25 de Febrero y 114 de 2017, de 17 de Octubre) que se hubiesen realizado entre el 1 de Noviembre de 2011, cuando comenzaron a desarrollarse los hechos del proceso independentista, y el 13 de Noviembre de 2023.”

Con los datos de las elecciones más recientes, de 23 de Julio de 2023, (446.029 de ERC más 395.449 de JPC) ascendieron a 861.449 los votos independentistas catalanes, es decir ¡un 2,3%! de los 37.469.453 electores totales, o ¡un 15,1%! de 5.703.737 de los electores totales en Cataluña.

Los anteriores son exactamente los datos democráticos de las urnas.









Claro que pudimos conocer otros “datos”:

      Calles, coches y árboles incendiados en Barcelona.

      Enfrentamientos brutales con la policía.

      Asalto y ocupación del aeropuerto Josep Tarradellas de El Prat.

      Asalto y corte de las autopistas de acceso a Barcelona.

      Asalto y secuestro de funcionarios públicos.

      Asalto y robo en todo tipo de comercios.

      


EL HOMBRE DE SANCHEZ CON PUIGDEMONT


Y un presidente del gobierno de España que, para continuar en lo suyo, negoció con los separatistas catalanes exonerarlos de culpa a cambio de sus votos.

Es irrefutable que todos estos son datos impactantes, angustiantes y hasta temibles. Pero no son datos democráticos.

La “normalización institucional, política y social de Cataluña” se concreta exactamente en un 2,3% de todos los españoles o en un 15,1% de los españoles catalanes con derecho al voto. ¿Pero qué mala broma es la del legislador?

En mi articulito “¿Representación de Golfos?” me extendí en lo referente a nuestra representación democrática.

 




El Tribunal Constitucional es un órgano constitucional, “intérprete supremo de la Constitucion de 1978”. La denominación “tribunal” puede resultar confusa ya que no forma parte del Poder Judicial. Está formado por doce miembros, magistrados del Supremo y de la Audiencia Nacional, profesores universitarios, letrados de las Cortes, tribunal económico-administrativo, consejo de garantías estatutarias catalán, vocales del Consejo Geberal de Poder Judicial).

      Conde-Pumpido, magistrado del Supremo, preside el Constitucional. (En 2004 ya fue fiscal general nombrado por Rodriguez Zapatero.) ¿Creéis posible la imparcialidad del caballero?

En resúmen, está integrado por doce miembros, cuatro por el Congreso, cuatro por el Senado, dos por el Gobierno y dos por el Consejo General del Poder Judicial. Para mí está claro que, por encima de la formación y prestigio jurídico, resulta ser un órgano político-partidista (8 por las Cortes, 2 por el Gobierno y tan sólo dos por los Jueces). Por tanto, se conoce de antemano el sentido de cada fallo y la votación se produce por bloques políticos.

Si centramos nuestra atención en el meollo y no nos perdemos en teatralizaciones y fuegos de artificios, la secuencia real sería:





      1: en marzo de 2006 se aprueba el estatuto de Cataluña con el apoyo de Rodriguez Zapatero (PSOE) que es deudor personal del PSC (partido socialista catalán).

      2: el 1-10-2017 se celebra en Cataluña el “referéndum de independencia”, convocado por el presidente de la Generalitat Puigdemont. El Constitucional lo declara ilegal.






      3: el 27-10-2017 el Parlamento Catalán declara la independencia de la “república catalana”. El Gobierno de España aplica el a. 155 de la Constitucion, interviene la autonomía catalana y destituye a Puigdemont que logra huir de España.





      4: el 14-10-2019 el Tribunal Supremo condena por sedición y malversación a Oriol y a otros tres juzgados y a otros cinco por sedición.

      5: el 23-7-2023, el PSOE de Pedro Sánchez pierde las elecciones obteniendo 121 diputados. Pero consigue ser investido presidente con el apoyo de 179 votos, entre otros, los siete imprescindibles diputados de JPC a cambio de ofrecerles la amnistía a los catalanes condenados por el Tribunal Supremo.





      6: el 30-5-2024, por 177 votos a favor contra 171, el Congreso aprueba la Amnistía para los condenados catalanes. La redacción del borrador de la ley la hizo el equipo de Puigdemont con la colaboración de alguno de los golfos de Sánchez, hoy en desgracia.

      7: 26-6-2025, el Tribunal Constitucional valida la Amnistía (por 6 votos de la selección socialista contra 4 de la selección pepera).

 

La Amnistía, el “Olvido”, supone que los delitos no existieron, por lo que no se cometieron. Por tanto, fueron nuestros representantes (políticos y jurídicos), o sea todos nosotros, los que les condenamos injustamente. Habríamos de pedir perdón e indemnizar a los afectados por cuanto estimen que les dañamos.

Como mi billetera la tiene y maneja Sánchez, de ella saldrá lo que quiera y, agotada, firmará a cargo mío y de mis descendientes los préstamos que le dé la gana.

Pero lo que aún no tiene (todo se podrá andar) es mi raciocinio y voluntad.

Yo no “olvido” ni perdono los graves daños que nos produjeron más los que intentaron ocasionarnos los delincuentes catalanes juzgados y condenados en un proceso con absolutas garantías jurídicas por nuestro más alto tribunal.

Ya está bien: las necesidades y caprichos de Sánchez, que se lo pague de su bolsillo, del mío o de mis deudas, pero no trago sus patrañas y barrabasadas ni acepto ninguna de  las teatrales interpretaciones de sus sirvientes.





Ha hecho del Parlamento, de la Fiscalía y del Constitucional, parte de su servidumbre, aunque los pague con nuestro patrimonio nacional, con nuestros dineros y con nuestras deudas.

¡’AMNĒSTÍA NO!


CM

28-6-2025