PILARISTAS

(Cuzcurrita 3)

 

Jaime (Benjumea), me encuentro profundamente agradecido y dignificado por haberme incluído en el grupo. Confío en estar a la altura, lo intentaré. Sólo me tranquiliza que podré hacer un papel decente en la sección de bobadas. Muchas gracias, amigo.

 

Guillermo (Palanca), responsable primero de que me tengáis aquí. Tu enorme afecto (compartido), tu ilusión juvenil y contagiosa y tu tesón son ejemplares, incluso para un puro pilarista como tú. Mi enorme agradecimiento querido amigo. La “culpa” es tuya.

 

Ignacio (Alfaro), debo agradecerte a ti el afecto con el que trataste mi ligero recuerdo del Colegio. Todo bueno y, lo mejor, vosotros. Un abrazo.

 

Carlos (Manglano), mia es la gratitud por este reencuentro con quienes compartimos esas vivencias y sentimientos. Don Genaro me “barría” literalmente al frontón (pero una vez le gané y él se alegró más que nunca). Un abrazo.

 

 

 

Don Enrique Calvo, Enrique (licencia que me proporciona la edad sin el menor menoscabo de mi total respeto). ¡Fantástico encontrar aquí a una de las personas que mayor y mejor huella ha dejado en mi vida! Lo considero como un milagro. Muchas gracias por tanto.

 

Fernando (Montojo), muy querido amigo. Eres un gran “capacitado” para lo más importante de la vida. Escucharte (o leerte) siempre ha sido y seguirá siendo un privilegio. Un gran abrazo.

 

Querido Ramiro (Rodríguez Irizábal), casi tan buen portero de fútbol como persona. Confío en que mi aliento te llegue para superar rápido tu malestar. Rezo por ello. Un gran abrazo.

 

Javier (Bengoa), efectivamente, gracias al tándem Paloma-Merche he tenido una conexión con vuestras alegrias que he hecho siempre mías. Un gran abrazo.

 

En general, a cuantos formáis parte de este magnífico grupo, mi gratitud por acogerme. Intentaré estar a la altura. Abrazos afectuosos.

 

Mi recuerdo más especial a quienes habéis cambiado a otra vida. Compañeros, amigos íntimos, no dejéis de echarnos una mano desde vuestro superior destino. Esto anda revuelto, oscuro y violento y muy precisado de bienes espirituales (los otros, siguen muy mal repartidos por el mundo).

 

Finalmente me veo obligado a ofreceros una microficha:

-Trabajé mucho durante muchos años hasta hace catorce. Muy satisfecho (aún recibo manifestaciones de afecto por dirigidos y directores).

-Hace doce años, los médicos, los “míos” y Nuestra Señora del Pilar, me salvaron in extremis la vida de una sepsis venenosa. Un año después, volvieron a emplearse para que saliera adelante de un cáncer de cólon. Un equipo formidable.

-Hasta ahora hemos pasado buena parte del tiempo en Ribadesella. Allí vive parte de mi familia (hijo, nuera y dos excepcionales nietos) y es la tierra que me enamoró hace … Ahora albergo la esperanza de poder regresar.

-Mi hija (debe llevar sangre de Agustina de Aragón, Juana de Arco, … o algo parecido), nos trajo de Siberia una encantadora nieta, con problemas. Verlas superar obstáculos es un espectáculo.

-He disfrutado una enormidad de fraternales amigos que han regalado vidas cautivadoras y que han ido emprendiendo el viaje final. Hace unos años, entre vecinos-amigos formamos un cuarteto de ancianos que semanalmente se reúne para actualizar “batallitas”, merendar frugalmente y pelear al mus sin compasión.

-Leo hasta que mi dañada vista me aconseja. Escribo para escape de emociones, alguna posible reflexión y puro divertimento que no buscan ninguna difusión.

-Y me ocupo de atender lo que trae la vida con el mejor espíritu de que soy capaz, aunque flaquee a veces. Pero ¿quién dijo que es aún más importante levantarse que evitar caerse? (un sabio seguramente).

 

Y acabo, para bien de todos vosotros, porque tampoco tengo mucho más digno de mención. Perdonadme por el incordio (ya veis que, además, “doy la brasa”). Representáis esencias de mi persona.

 

15-4-24

CM